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El montañero nos recibeen su León natal, del que siempre hace gala, por los montes de Foncebadón y Frazuelo. Así nos impregnamos del "espíritu Calleja", el que viven invitados como Elsa Pataky, Mercedes Milá o Blanca Suárez cuando se unen a sus aventuras. Mientras caminamos, Jesús nos muestra el paisaje y habla de sus programas Planeta Calleja y Volando Voy y comparte con nosotros algunos de los lugares que no debemos perdernos, y de las rutas más recónditas que él hace cuando puede escaparse de sus grabaciones.
Por tierra, mar y aire (con su propio helicóptero), el aventurero ha conseguido descubrir una España para muchos desconocida; disfrutar de su gente, su flora y su fauna y, cómo no, de sus mejores platos; porque una de sus grandes pasiones es asaltar una buena mesa para cargar energía.
No imagino otra vida que no sea con una maleta de un lado a otro, bueno, con una bolsa o una mochila, que casi siempre es lo que llevo, pero siempre en continuo movimiento. Creo que es una cuestión de educación, mi hermano Kiko y yo siempre hemos tenido pasión por viajar y por la naturaleza, y siempre que podíamos íbamos a algún lado; primero por León, luego a la zona de Castilla, España... Mi primer viaje importante fue después de hacer la mili, a la India, y luego abrí mi propia peluquería para ganar dinero y poder viajar.
Es importante el dinero, pero hoy en día puedes hacer viajes sin gastarte demasiado; hacer rutas en bici, escalada (que me apasiona), buceo, trekking, esquí... no son precios desorbitados y, al final, lo importante es poder hacer algo que nos llene.
Me gusta viajar sin planear. Sí pienso en el destino y lo que podría ver o hacer, pero a partir de ahí lo que vaya surgiendo. Hay que tener fortaleza mental y sentido del humor, creo que eso no debe faltar nunca en un viaje.
Tras la grabación de 'Volando Voy' en el cabo Ortegal, con el geólogo Fran Canosa. Foto:Zanskar Producciones.Guardar.
Me gusta viajar con mi equipo del programa, ya nos conocemos y somos como una pequeña familia; con mi cámara, Emilio Valdés, con el que llevo ya muchos años trabajando; con María Ruiz, mi socia; los directores, Dani Lora e Irene García... Pero con mi hermano Kike y con Yesbil, mi mejor amigo, también he viajado muchísimo y nos entendemos a la perfección. Hace poco estuvimos de nuevo en Picos de Europa, es un viaje que hemos hecho en varias ocasiones, pero fue genial. Ese viaje luego lo repetí con el expresidente Zapatero para el programa Desafío Extremo. Hicimos una ruta en la que salimos de Posada de Valdeón y luego visitamos el refugio de Collado Jermoso, el más recóndito que existe. Fue muy divertido.
Tengo muchas aficiones; además de viajar y la montaña, me gusta sobrevolar en helicóptero, hago rallyes y me encanta hacer rutas con la bici, como la del LeónMola y está en Wikiloc. Es muy variada, y fuimos por pistas, caminos, sendas nada transitadas (que es lo que más me gusta): 80 kilómetros por algunos pueblos cercanos a León, Garrafe, Fontanos, Cuadros, Lorenzana, viendo jabalís y corzos en bosques de robles y encinas.
Me encanta salir a correr sobre todo por montes y montañas, y ya me he perdido unas cuantas veces (aunque intento llevar cobertura para que me puedan ir a recoger). Después me gusta reunirme a tomar algo con amigos, en pueblos como Maraña; en el 'Bar Riosol', que nosotros conocemos como 'Casa Josu', de José Eugenio. Allí nos juntamos algunas veces un grupo de vecinos y amigos. Es un bar de referencia de la montaña. Tiene muy buen embutido, sobre todo la cecina de chivo, y en invierno preparan un caldo buenísimo, que te hace entrar en calor, y un chupito casero de orujo que es un clásico después de las comidas.
También merece mucho la pena hacer rutas de este tipo por Las Médulas, son impresionantes, una visita casi obligada de León; o la de 'los Pantanos', en la vecina Palencia, donde disfruté muchísimo.
Intento descansar y como muy bien. Después de subir la montaña no hay nada como un buen plato de cuchara. En Castrillo de los Polvazares, por la zona de Astorga, hacen los mejores cocidos maragatos. Es un pueblo precioso de piedra roja con los portones y ventanas de colores. En 'Casa Juan Andrés' hacen un cocido maravilloso y es muy acogedor. Allí se come al revés: primero la carne con los rellenos y el chorizo; luego los garbanzos y el repollo; y la sopa se deja para el final. Luego siempre queda sitio para el postre, mazapán con natillas, que se corta en trocitos y se tira al cuenco.
Siempre que puedo me escapo a 'El Clandestino', el mejor restaurante de León. Está en la calle Cervantes, muy cerca de la catedral, en la zona del Cid, que es un sitio que se ha puesto muy de moda para tomar cortos y tapear por la ciudad. 'El Clandestino Gastrobar' es un sitio muy especial, donde me siento como en casa. Sus dueños, Toni y Lita, tienen mucha experiencia en este tipo de negocios y saben hacerte sentir bien.
Cuando han venido a visitarme algunos de los amigos que conocí grabando Planeta Calleja, como David Bisbal, Álex González o Dani Rovira, nos acercamos y les ha encantado. Aquí he vivido muy buenos momentos y tiene algunos de mis platos favoritos, como las costillas glaseadas, el tartar de salmón y vieiras o el gazpacho de sandía. La decoración es diferente a los bares de la zona, moderna, de madera, con inspiración neoyorkina y un jardín vertical precioso que comunica los salones.
Es visita obligada pasear por el Barrio Húmedo y la zona del Cid para picar algo en los bares. En la Calle Ancha, peatonal, 'La trastienda del 13' es un local hipster con decoración vintage y buen ambiente donde tomar unos vinos frente a la catedral. Sentarte en esa terraza a cenar no tiene precio.
Cuando estuvimos por la zona de Zamora, en la Sierra de la Culebra, volví enamorado de lo que vi. Descubrí un cañón que me alucinó, en el Río Tera, cerca del Lago de Sanabria. También estuvimos en la zona de Las Médulas, en El Bierzo, una antigua explotación minera de oro romana, un lugar que parece imposible que esté en España. En Doñana me deslumbró la variedad de ecosistemas: en algunos momentos parecía que estabas en África, había parte desértica y zonas verdes o animales como el lince... luego te dabas la vuelta y cambiaba completamente. Disfrutamos mucho porque nos permitieron grabar en lugares en los que no todo el mundo tiene acceso (los productores de Juego de Tronos y Star Wars lo intentaron y no les dejaron).
En el Delta del Ebro participamos en un experimento para evitar su desaparición. Es de los lugares que más me han sorprendido desde el aire, con el helicóptero y sabiendo que en unos años va a desaparecer se valora de otro modo. La enorme lengua de tierra llama mucho la atención, es espectacular y apenas se la conoce.
En Galicia grabamos los acantilados de Loiba en Cedeira con un geólogo, Fran Canosa, que nos explicó cómo se formó el cabo Ortegal. Desde el aire, las playas y unas bahías parecían el Trópico. Es una de las zonas más bonitas del mundo, donde se juntan el Océano Atlántico y el Mar Cantábrico.
Por último, me gusta veranear en Fornells, un pueblecito de pescadores en el norte de Mallorca, donde voy a bucear Recomiendo dos sitios para ir a comer o cenar, donde sirven la mejor langosta del mundo: El 's’Algaret', que también es hostal, con mucho encanto y ambiente familiar, en el centro de la isla, para alojarte si vas unos días; y 'Sa Llagosta', con su exquisita caldereta de langosta o el carpaccio de pulpo con melón.