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Santuario de Nuestra Señora de la Carballeda

Rionegro del Puente, Zamora

Los feligreses que recorren el Camino de Santiago Sanabrés y acceden a la localidad zamorana de Rionegro del Puente son testigos de la imponente torre de más de 20 metros de altura, compuesta por piedra de sillería, que sobresale en el conjunto del santuario de Nuestra Señora de la Carballeda, que abriga en su interior a la patrona de la comarca. La estructura, sustento de campanario, saluda con solemnidad y recogimiento espiritual, la devoción de aquellos visitantes prestos a dejarse imbuir por aromas de liturgia ceremoniosa.
Templo románico en sus orígenes, guarda en su interior una pequeña capilla que atestigua su antigüedad y que ha sido punto de partida de las reformas posteriores, conformándose  en el siglo XVIII su completa y actual composición. El pórtico de entrada recoge unas cadenas en la parte superior que, a modo de juez simbólico de la moral popular, advierte a los feligreses de la redención de aquellos que disponen de asuntos pendientes con la justicia. De cierta austeridad en su interior, el santuario muestra una planta de tres naves separadas por arcos agudos y semicolumnas adheridas adornando los pilares de sujeción. La techumbre interior juega con las texturas y formas: cubrimiento de madera, cúpula y bóveda estrellada coronan su diversidad.
El retablo mayor, que preside el altar principal, permite una mayor ornamentación. La talla de la Virgen de la Carballeda con su manto verde y blanco, coronada en plata y sujetando al Niño, conforma el aporte artístico más reseñable. La imagen fue remodelada en época barroca, ocultando con vestimenta y añadidos su origen románico.

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