Establecimientos gastrónomicos más buscados
Lugares de interés más visitados
Lo sentimos, no hay resultados para tu búsqueda. ¡Prueba otra vez!
La 'madre' tiene rasgos árabes y acusa el paso inexorable del tiempo. Conquistada por un caballero cristiano, sus entrañas alumbraron un hermoso vástago que llegó a ser “santo y seña” de una villa. La “vieja señora” es la antigua fortaleza árabe que mira con orgullo a su “heredero”, el Palacio del caballero Álvarez de Toledo, duque de Alba, conde de Oropesa y quinto virrey del Perú.
El imponente castillo de Oropesa, que se alza sobre un montículo de piedra, es en realidad dos (dos castillos en uno). El castillo viejo fue construido por los árabes en los siglos XII y XIII sobre una fortaleza romana, y conserva dos de sus primitivas torres. El castillo nuevo comenzó a construirse en el siglo XV y alberga el Palacio Condal, residencia de los condes de Oropesa y hoy convertido en Parador Nacional. Tiene tres plantas y es de estilo gótico-mudéjar, con algún detalle plateresco. A la derecha de su fachada, jalonada de escudos de las distintas familias condales, se encuentra “El peinador de la reina”, en alusión a la esposa de Francisco Álvarez de Toledo, Mencía. Se sitúa en una torre adosada al edificio y es la habitación más grande del palacio. La entrada principal nos conduce por un pasadizo hasta el patio de armas, donde una impresionante escalinata de piedra, única en España, nos invita a acceder a las dos torres desde donde obtendremos unas magníficas vistas. En su torre del homenaje, de cinco plantas, aún se conserva el escudo heráldico de los Álvarez de Toledo.