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Islas de Ons

Bueu, Pontevedra

Sobrevuela los secretos de una de las islas más bellas de Galicia, sumérgete en sus aguas cristalinas, fotografía su abrupto paisaje virgen en el que desembarcan sus playas, o vive las leyendas de los muertos que por aquí pasean… Las islas de Ons compiten en belleza con las Cíes. Sin embargo, Ons cobija una parroquia y viviendas en su interior. Estos lugareños aislados (aparentemente) de Pontevedra y la localidad que los contiene, son personas de tradición y leyendas, ubicados en un paraje virgen apenas disimulado por la mano del hombre. La luz la ampara, al igual que las mejores vistas, del Faro de Ons, uno de los más grandes y de mayor alcance de España situado en el Cucorno, la parte más alta de la isla. Permite observar cómo cabe el entorno natural en una mano, una fotografía que se graba en la retina de todo el que mira.

Un sepulcro antropomorfo hace volar la imaginación en Ons, en la playa de Area dos Cans y conocido como Laxe do Crego, caprichoso, ya que únicamente se deja ver cuando la marea 'duerme' y tranquilo puede emerger. Según cuentan, era el Camposanto de un monje que vivía en el monasterio que gobernaba la isla años atrás. Quizá quiso escapar de la puerta al abismo (O buraco do Inferno) de estas leyendas con su nombre que se tragaba, junto con sus almas, el despiste de aquellos que se asomaron demasiado alguna vez. La bravura de sus playas tiene su eco natural con árboles que incluso actúan de sombrillas naturales, aptas para los que no encuentran la ropa y quieren refugiarse del sol, como en Melide, ubicada en el norte de la isla, perfecta para nudistas. O si se quiere retratar el fondo marino, las aguas color cristal se amontonan en la playa de Pereiró, con un precioso arrecife rocoso.

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